El artista José Uríszar, durante la realización de la obra en el patio de la Casa Palacio Espartero, actual Museo de La Rioja, declarado Lugar de Memoria Democrática, donde ha pintado un gran mural con el retrato de la esposa de este político liberal español, Doña Jacinta, inaugurado este domingo dentro del Festival Actual 2025, que se celebra en Logroño. EFE/ Raquel Manzanares

Uríszar pinta un mural con la imagen de la esposa de Espartero en el Museo de La Rioja

Logroño (EFE).- La Casa Palacio Espartero, actual Museo de La Rioja, declarado Lugar de Memoria Democrática, cuelga desde este domingo un gran mural con la imagen de Jacinta Guadalupe Martínez de Sicilia y Santa Cruz -duquesa de la Victoria-, casada con el político liberal español, y que es obra del artista riojano José Uríszar.


La intervención artística se ha inaugurado este domingo, dentro de la programación del Festival Actual 2025, que se celebra en Logroño entre los días 2 y 6 de enero, y que organizan el Gobierno de La Rioja, con el apoyo del Ayuntamiento de Logroño y la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR).


Se trata de un mural sobre la pared, diseñado con pintura acrílica especial para fachadas, de 4,5 metros de ancho y 5,5 metros de alto, situado en el ‘Patio de doña Jacinta’, del Palacio Espartero, que constituye uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad y que es una construcción barroca del siglo XVIII, donde vivió el general Baldomero Espartero, tras retirarse de la política y casarse con María Jacinta.


El director general de Cultura del Gobierno regional, Roberto Iturriaga, ha destacado que se ha realizado esta propuesta “para poner bonito” el Patio del Museo, y «qué mejor manera de hacerlo que con un artista riojano como José Uríszar” (Briñas, La Rioja, 1960).


Para realizar la intervención artística, Uríszar ha reproducido un pequeño retrato de María Jacinta, que está en posesión del Museo desde la óptica del realismo romántico, pese a que, como ha indicado a EFE, le hubiera gustado “hacerlo con cubismo”, que es, ha dicho, su estilo preferido.


Ha indicado que ha estado “aproximadamente 10 días” en los que ha combatido “hostilidades climatológicas” por la lluvia caída en el patio del Museo y se ha mostrado “satisfecho” con el resultado final, ya que “si se observa el cuadrado original retratado (de Antonio María Esquivel) y el mural, el resultado es prácticamente el mismo”.