Momento de la igualá de costaleros celebrada en Logroño. EFE/Raquel Manzanares

Unos 40 costaleros se preparan con “una igualá original” para portar a ‘El Cautivo’

Sergio Jiménez Foronda |
Logroño (EFE).- Unos 40 costaleros de la Cofradía de la Entrada de Jesús en Jerusalén de Logroño se preparan este domingo con “una igualá original», algo diferente a lo que se está acostumbrado a ver en la capital riojana y que está abierta a nuevos participantes para procesionar a costal la imagen de Nuestro Padre Jesús Cautivo.

Así lo ha afirmado a EFE el capataz de este paso, Luis Ignacio Arruti, quien ha explicado que una igualá es “el momento en el que se igualan las alturas de las trabajaderas en las que van trabajando los costaleros” al portar la imagen.

Arruti, también secretario de la Hermandad de Cofradías de la Pasión de la Ciudad de Logroño, ha precisado que una trabajadera es una barra de madera que une un lateral (de la imagen) con el otro y en la que los costaleros apoyan la séptima vértebra y el costal, y «es con lo que hacen fuerza y llevan el peso».

Los costaleros participan en la igualá celebrada en Logroño.- EFE/Raquel Manzanares

De ahí la importancia de realizar una igualá, para que “se igualen todas las alturas con el fin de que todas las trabajaderas vayan, digamos, unificadas en alturas y los costaleros puedan ir juntos”, ha subrayado.

Abierto a cualquier costalero

“Si quieres formar parte de la cuadrilla de costaleros de Nuestro Padre Jesús Cautivo, te esperamos”, indica el cartel que la Cofradía ha difundido para invitar a participar en la igualá, con el fin de abrirla a todo el que quiera.

Este año, “como vamos a hacer una igualá, digamos, imitando más a una igualá original, que es algo diferente, hemos decidido darle un poco otro aire” e invitar a todo el que se quiera unir, tenga o no experiencia como costalero, ha dicho, porque «nunca está de más un relevo”.

“El costal ya lleva 10 años implantado en Logroño, pero no hemos hecho una igualá como tal, puesto que la tiene que hacer alguien que sabe; y se hace, muchas veces, casi con la mano, midiendo y demás”, ha indicado.

Ha señalado que esta igualá se realizará en la Casa de Andalucía de La Rioja y se ha establecido “una invitación abierta a todo el que quiera probar el costal”, para lo que solo se requiere “ser mayor de 18 años y tener ganas”.

Diversos motivos para participar

Al igual que los costaleros, ha continuado, cada una de las personas que se anime a participar puede hacerlo “por los motivos que decida, que pueden ser por fe, por gusto o por pertenecer a una cofradía”, por ejemplo.

Arruti ha añadido que, con las medidas resultantes de la igualá, se igualan las trabajaderas a la misma altura, de tal forma que “si la séptima vértebra del que se ubica más alto está a 1,70 metros, todo se mira a partir de 1,70 y se van poniendo calces”.

Antes de que llegue la Semana Santa, dependiendo de si realmente más personas se animan a procesionar, habrá que realizar una segunda igualá para ajustar un poco las medidas, ha incidido.

El capataz, Luis Ignacio Arruti (iz), y el segundo capataz Juan José Redondo (d).- EFE/Raquel Manzanares

«Un paso de Semana Santa pesa, eso todos lo sabemos, y tenemos una media de 40 kilogramos por persona ahora mismo”, algo a tener en cuenta si se quiere participar, para lo que ha recomendado llevar unas zapatillas negras con suela plana.

Esta cofradía cuenta con una cuadrilla consolidada de personas que ya han portado imágenes en procesión, por ejemplo, en Zaragoza, algo que «también engancha mucho a que, igual, se invite a la gente a portar aquí”, ha subrayado.

Primer paso a costal

La imagen de Nuestro Padre Jesús Cautivo, que es el primer paso en Logroño que procesionó a costal, recorre la capital riojana en la tarde de Lunes Santo, durante el Vía Crucis Procesional que su Cofradía realiza, sobre andas de caoba con cartelas plateadas, portadas sobre seis varales.

La Cofradía de la Entrada de Jesús en Jerusalén, en marzo de 2007, presentó y bendijo esta imagen, realizada en madera de cedro policromada por el imaginero hispalense José Antonio Navarro Arteaga y pesa 1.600 kilos.

La primera procesión en la que participó en Logroño fue la del Santo Entierro del Viernes Santo de ese mismo año, que se suspendió a mitad de recorrido por una gran tormenta y Nuestro Padre Jesús Cautivo se «refugió» en el pasaje de Bretón de los Herreros.

La imagen representa a Cristo atado de manos y luce una túnica morada, con camisa blanca y cíngulo de esclavitud dorado.