Moscú (EFE).- El Ministerio de Defensa de Rusia anunció hoy el envío de refuerzos a la región fronteriza de Kursk tras el ataque perpetrado esta mañana por unidades mecanizadas del ejército ucraniano.
Unos 300 soldados enemigos atacaron las posiciones de las unidades de la guardia fronteriza rusa apoyados por 11 tanques y más de una veintena de vehículos blindados, señala el comunicado castrense.
Rusia ataca Ucrania con cuatro misiles balísticos
Rusia lanzó el lunes por la noche contra la región de Kiev cuatro misiles balísticos Iskander-M y KN-23, dos de los cuales fueron derribados por las defensas aéreas ucranianas, según informó la Fuerza Aérea de Ucrania en su parte de hoy.
Los misiles KN-23 son misiles balísticos de fabricación norcoreana que Pyongyang suministra a Moscú y que Rusia ya ha utilizado en anteriores ataques contra territorio ucraniano.
“El lunes, alrededor de las 23.00, el enemigo lanzó contra Kiev y los alrededores un ataque con misiles. Según la información preliminar, el agresor utilizó armamento balístico”, aseguraron poco antes las autoridades regionales en un comunicado.
Por su parte, según la publicación ucraniana especializada en asuntos militares Defense Express, los fragmentos encontrados en el lugar en el que cayó uno de los misiles, coincidían con fragmentos previamente identificados como parte de misiles balísticos KN-23 norcoreanos utilizados por Rusia en anteriores ataques.
Drones sobre el norte, el sur y el oeste de Ucrania
Además de los misiles balísticos lanzados contra Kiev y sus alrededores, las fuerzas rusas lanzaron contra Ucrania dos misiles Kh-59 y 16 drones kamikaze iraníes Shahed.
Estos dos proyectiles y 15 de los drones fueron derribados sobre los óblasts de Kiev (norte), Jersón y Mikoláyiv (sur) y Jmelnitski (oeste).
Las autoridades ucranianas no han informado por el momento de muertos, heridos o daños materiales causados por este ataque.
