El Cairo (EFE).- Una nueva ronda de negociaciones para lograr una tregua en la Franja de Gaza entre los países mediadores -Egipto, Estados Unidos y Catar- e Israel comenzará mañana, domingo, en El Cairo, sin la presencia del grupo palestino Hamás, informó a EFE una fuente egipcia cercana a las conversaciones.
«A esta ronda asistirán únicamente las partes negociadoras de Catar, Estados Unidos, Israel y Egipto», señaló la fuente de seguridad de alto rango, que pidió el anonimato por la sensibilidad de este tema, y añadió que el movimiento palestino no asistirá a esta ronda, pese a que una delegación del grupo encabezada por Khalil al Hayya se encuentra en la capital egipcia.
Agregó que, en esta ronda, los mediadores tratarán de llegar a una solución «ante la intransigencia israelí respecto a las condiciones del alto el fuego en Gaza», así como del canje de rehenes israelíes por prisioneros palestinos en cárceles israelíes y la entrada de ayuda a la Franja de Gaza.
Los mediadores intentarán además «presionar a la parte israelí a través de su delegación participante, que incluye a los jefes de las dos agencias del Mossad, David Barnea y del Shin Bet, Ronen Bar, para volver al acuerdo de julio anunciado por el presidente estadounidense Joe Biden».

Hamás y su rechazo a la propuesta
La fuente egipcia indicó que la delegación palestina, encabezada por Al Hayya, mantuvo este sábado una reunión larga con los mediadores para discutir la última propuesta presentada en Doha la semana pasada, la cual rechaza por completo y tildó de «inaceptables las enmiendas introducidas por Israel».
Entre los grandes escollos se encuentran mantener la presencia de las tropas israelíes en los corredores Filadelfia -en la frontera entre Gaza y Egipto- y Netzarim -una ruta militar que parte el enclave en dos mitades por el centro-, además de no querer firmar un compromiso firme para el alto el fuego definitivo y reservarse la opción de retomar la guerra.
El movimiento, siempre según el informante, llamó a «la necesidad de que la comunidad internacional presione a Israel y no a Hamás, porque Israel es el agresor, no el movimiento Hamás, y las condiciones humanitarias se están deteriorando gravemente en la Franja de Gaza debido a la guerra israelí y las masacres que comete».
El grupo dijo, según la fuente, que es necesario que haya un acuerdo claro para el intercambio de rehenes por prisioneros sin «rodeos» israelíes, «como de costumbre dado que rechazan ciertos nombres».

Adherido a la propuesta de Biden
El grupo palestino sigue adherido al borrador que aceptó el pasado 2 de julio, a partir de una propuesta de Estados Unidos anunciada en mayo por el presidente, Joe Biden, que incluía el fin de las hostilidades y la retirada de las tropas israelíes del enclave en una segunda fase.
Este viernes Egipto, Estados Unidos e Israel mantuvieron en El Cairo conversaciones para intentar cerrar el tema del corredor de Filadelfia.
Estas conversaciones transcurrieron en un ambiente «positivo» y «constructivo», según fuentes de los tres países.
Ante el nuevo estancamiento de las negociaciones en julio, EEUU presentó hace dos semanas una nueva propuesta «para tender puentes», que trató de aunar los reclamos de ambas partes, pero que Hamás rechazó de plano y tildó de «golpe de Estado» porque, según alega, solo sirve a los intereses de Israel.
El diálogo también se estancó después del 31 de julio, cuando en un ataque atribuido a Israel fue asesinado en Teherán el máximo jefe político de Hamás y su jefe negociador, Ismail Haniyeh.
Unos 70 muertos en las últimas 48 horas en Gaza
Mientras, los muertos en la Franja de Gaza tras más diez meses de guerra ascienden a 40.334 tras registrar 69 víctimas mortales en las últimas 48 horas en diferentes ataques israelíes a lo largo de todo el enclave, según el Ministerio de Sanidad gazatí, controlado por Hamás.
«La ocupación israelí cometió 5 masacres contra familias en la Franja de Gaza durante las últimas 48 horas, de las cuales 69 mártires y 212 heridos llegaron a los hospitales», informó el Ministerio, que cifra es más de 10.000 los desaparecidos bajo los escombros.

Al menos 37 palestinos han muerto por ataques del Ejército israelí en la Franja de Gaza desde el amanecer, en especial en el área de Jan Yunis, en el sur del enclave, cuyos hospitales han recibido 32 cadáveres en las últimas horas, según fuentes médicas palestinas.
En el barrio de Al Amal, en el oeste de Jan Yunis, un ataque contra la vivienda de la familia Kalakh se cobró la vida de once personas, incluidos cuatro niños; mientras que un bombardeo con drones en la zona de Katiba, en el centro de la ciudad, mató a otras ocho personas.
También en Katiba, cinco personas murieron por un bombardeo israelí contra un tuk-tuk motorizado, según la Defensa Civil de Gaza.
Además, un hombre murió por disparos de artillería contra tiendas de campaña de desplazados también en la zona de Jan Yunis, que ha sufrido hasta 12 órdenes de evacuación en lo que va de agosto, obligando al desplazamiento de unas 250.000 personas ante el retorno de la ofensiva militar de Israel.
Combates cuerpo a cuerpo en el centro y sur de la Franja
Las autoridades gazatíes denunciaron hoy que, desde el inicio de la guerra, el «área humanitaria», supuestamente segura para civiles, se ha reducido de 230 kilómetros cuadrados (63% de la superficie) a 35 km, equivalente al 9,5% del territorio gazatí.
Los equipos de la Defensa Civil también recuperaron tres cuerpos en Rafah, extremo meridional de la Franja, donde las tropas israelíes entraron en mayo y esta semana aseguraron haber derrotado a los cuatro batallones que conformaban la Brigada de Hamás de Rafah, además de haber destruido unos 150 túneles en la zona.

En el centro del enclave, los ataques aéreos tuvieron como objetivo las torres Ein Jalout en el campamento de refugiados de Nuseirat, matando al menos a tres personas e hiriendo a otras; mientras que la ciudad de Deir al Balah ha sufrido numerosos bombardeos en las últimas horas.
El 90 % de la población de Gaza, más de 2 millones, ha sido desplazada durante la guerra, mientras enfermedades infecciosas y cutáneas se propagan rápidamente por los campos de desplazados entre condiciones de hacinamiento, y falta de saneamiento, agua potable y artículos de higiene.