Entrada de la prisión de Samui, donde Daniel Sancho permanece de momento tras ser condenado. EFE/Concepción Dominguez

Daniel Sancho está siendo trasladado a la prisión tailandesa de Surat Thani

Koh Samui (Tailandia) (EFE).- Daniel Sancho, el español condenado a cadena perpetua en Tailandia por el asesinato premeditado del cirujano colombiano Edwin Arrieta, fue trasladado este viernes a la prisión de Surat Thani, según varias fuentes confirmaron a EFE.

Daniel Sancho, de 30 años, fue trasladado hoy por ferri y carretera desde la isla de Samui (sur), donde el jueves fue sentenciado por el crimen cometido en agosto de 2023, hasta Surat Thani, situada a unos 100 kilómetros en suelo continental.

En una zona despoblada y rodeada de campos de cultivo, la prisión cuenta con instalaciones nuevas, inauguradas en febrero de 2023 a unos 15 kilómetros al este de ciudad de Surat Thani (más de 600 kilómetros al sur de Bangkok).

El penal se divide en diez departamentos: la cocina, la zona de confinamiento, el área hospitalaria, la zona para presos de alto perfil, dos zonas de celdas general, la zona de alta seguridad, el área de registro, la parte de mujeres y el módulo para actividades educativas.

Entrada de la prisión de Samui,
Entrada de la prisión de Samui. EFE/Concepción Dominguez

Informe sobre prisiones

Según el blog de la web del centro, Surat Thani tuvo en el pasado problemas de tráfico de drogas, lo que generó inseguridad.

El presidio de Surat Thani, para presos con condenas de entre 15 años y pena de muerte, acoge más de 5.300 reos, unas diez veces la población reclusa del de Samui, donde Sancho pidió sin éxito poder quedarse.

La Federación Internacional para los Derechos Humanos (FIDH), que realiza anualmente un informe sobre la situación de las cárceles en Tailandia, indicó a EFE que no pudieron monitorizar la situación de esta prisión, aunque sí saben que acoge a más presos de su capacidad oficial.

Sancho pidió quedarse en la prisión de Samui

La sentencia, a la que tendrán las partes en unos 10 días, sostuvo que Sancho asesinó a Arrieta con premeditación, por lo que fue inicialmente condenado a la pena de muerte, reducida a cadena perpetua por la “colaboración beneficiosa” del español en el proceso y el “trabajo de la defensa”.

El juez, además, halló a Sancho culpable de los otros dos delitos de los que estaba acusado: el descuartizamiento de Arrieta, de 44 años, y robo de documentación ajena, por el pasaporte de la víctima.

El español pidió al juez tras conocer el fallo quedarse en la prisión de Samui, considerada «amable» en Tailandia por su baja densidad y sus medidas de seguridad más laxas, si bien el centro no aloja a presos condenados a más de 15 años de cárcel.

La cárcel de Surat Thani

La de Surat Thani, en cambio, dispone de un módulo de alta seguridad e incluye a presidiarios condenados a partir de los 15 años de cárcel y hasta la pena de muerte, según indica en su página web.

Hacinamiento en celdas comunitarias mal ventiladas, comida y agua de mala calidad y hasta castigos corporales son algunas de las condiciones de las prisiones en Tailandia, según el último informe sobre el estado de las cárceles publicado este año por FIDH y la Unión por la Libertad Civil (UCL, sigla en inglés).

Sancho, hijo del actor español Rodolfo Sancho y de la analista de inversiones Silvia Bronchalo, confesó inicialmente el crimen pero después y durante el juicio mantuvo que la muerte de Arrieta, a quien conocía desde meses atrás y con quien quedó en Phangan el día de los hechos, se debió a un accidente.

Rodolfo Sancho visitó a su hijo en la cárcel

Sancho, hijo del actor español Rodolfo Sancho y de la analista de inversiones Silvia Bronchalo, confesó inicialmente el crimen pero después y durante el juicio mantuvo que la muerte de Arrieta, con quien quedó en la isla tailandesa de Phangan el día de los hechos, se debió a un accidente.

Ambos progenitores visitaron hoy a su hijo en la prisión de Samui antes de que fuera traslasdado a Surat Thani.

El español aún puede presentar dos recursos, uno al Tribunal de Apelaciones y otro al Supremo de Tailandia, antes de que la condena se firme, algo que ya adelantaron que harían sus asesores legales.