Washington (EFE).- El magnate Elon Musk anunció este miércoles su salida del Gobierno de Donald Trump, tras expresar «decepción» por el megaproyecto fiscal y presupuestario del republicano, que – según dijo- «socava» su trabajo como asesor de eficiencia.
«Ahora que mi tiempo programado como Empleado gubernamental especial llega a su fin, quiero dar las gracias al presidente Donald Trump por la oportunidad de reducir el gasto despilfarrador», dijo Musk -esta noche- en un breve mensaje en su cuenta de X.
El magnate dijo estar «decepcionado» con el megaproyecto fiscal y presupuestario impulsado por Donald Trump porque aumenta el déficit y dispara el gasto público.
As my scheduled time as a Special Government Employee comes to an end, I would like to thank President @realDonaldTrump for the opportunity to reduce wasteful spending.
— Elon Musk (@elonmusk) May 29, 2025
The @DOGE mission will only strengthen over time as it becomes a way of life throughout the government.
Musk, que en los últimos meses ha ejercido como asesor especial de Trump al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), criticó el nombrado como «gran y hermoso proyecto de ley», aprobado por la Cámara de Representantes la semana pasada y enviado al Senado estadounidense para su discusión.
“Francamente, me decepcionó ver el enorme proyecto de ley de gastos, que aumenta el déficit presupuestario, no solo lo reduce, y socava el trabajo que está realizando el equipo de DOGE”, declaró Musk al programa CBS Sunday Morning, según fragmentos publicados por la cadena como adelanto a su transmisión el domingo próximo.
El multimillonario fundador de Tesla ofreció la entrevista en medio de una campaña de prensa alrededor del lanzamiento el martes del nuevo cohete Starship, fabricado por la empresa SpaceX de Musk.
“Creo que un proyecto de ley puede ser grande o puede ser hermoso, pero no sé si puede ser ambas cosas. Es mi opinión personal”, indicó.
Musk va tomando distancia de Trump
La aprobación por estrecho margen de la propuesta significó una victoria para los republicanos en la Cámara de Representantes, a pesar de varias voces disidentes dentro del partido que buscaban profundizar en los recortes al gasto y agilizar su entrada en vigor. Ahora, se enfrenta a una ardua batalla en el Senado en busca del voto final.
El megaproyecto busca extender las exenciones fiscales de Trump en su primer mandato (2017-2021) y añade nuevas rebajas, junto a un incremento en los fondos para la gestión de la frontera y la aplicación de la dura política migratoria del presidente. Esto se compensaría en parte con recortes a programas de seguridad social y ayudas.

La Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO en inglés) estimó en un informe que la nueva legislación sumará unos tres billones de dólares en diez años a la deuda nacional, actualmente calculada en más de 36 billones de dólares.
Aunque se mantuvo muy cercano al presidente antes y después de la investidura del republicano en enero pasado, Musk se ha ido apartando poco a poco de su labor frente al controvertido DOGE, que ha impulsado miles de despidos de trabajadores federales y recomendado la reducción en las operaciones del Gobierno.
En abril, el magnate anunció que reduciría «a un día o dos» sus responsabilidades como asesor de la istración a partir de este mayo, una decisión anunciada poco después de que Tesla reportara una caída en sus beneficios netos del 71 % en el primer trimestre del año.
Entonces, Trump elogió la labor de Musk frente a DOGE al asegurar que le ha ahorrado “mucho dinero” al país.