La Habana (EFE).- El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, aseguró este jueves que el tarifazo en la telefonía móvil se va a mantener a grandes rasgos, pese a las críticas mayoritarias en la población, para con esos ingresos evitar el «colapso tecnológico» y el «inminente desplome» del sistema de telecomunicaciones.
Díaz-Canel hizo estas declaraciones en su podcast Desde la presidencia, dedicado en esta edición a la polémica en torno a la fuerte subida de los precios del monopolio estatal de las telecomunicaciones Etecsa, y a la dolarización parcial de sus servicios (cuando la mayoría de la población no tiene a divisas).
«Renunciar a implementar las medidas sería renunciar a ingresos sin los cuales estaríamos acelerando el ya eminente desplome del servicio», dijo el presidente cubano, quien agregó no obstante que las autoridades están dispuestas a hacer «correcciones» y «seguir buscando soluciones».
El paquete de medidas, anunciado el 30 de mayo e implementado dos días después, incluía un paquete de 6 gigabites (GB) básico mensual por 360 pesos (3 dólares al tipo de cambio oficial para las personas físicas). A partir de entonces las recarga superaban el salario mínimo o debía realizarse en divisas.

Críticas estudiantiles contra el tarifazo
Las fuertes críticas, especialmente visibles en el ámbito universitario, llevaron a la empresa a ofrecer un segundo paquete básico en iguales condiciones a algunos colectivos, como los estudiantes, algo que estos han rechazado por excluyente.
«Este paso no lo deseábamos, pero había que darlo», aseguró Díaz-Canel, quien afirmó asimismo: «No hay mejor momento nunca para medidas que quitan o limitan beneficios sociales que se han alcanzado que es este el caso».
Díaz-Canel agregó que «ninguna medida que limita beneficios» agrada al Ejecutivo, por lo que es «deber» del Gobierno «explicar exhaustivamente» la situación, porque a su juicio el principal problema ha sido de «comunicación».
El presidente cubano mostró comprensión con «insatisfacciones», «disgustos» y «críticas justas» que han propiciado «análisis críticos desde las estructuras del Partido (Comunista de Cuba, PCC) y el Gobierno, pero denunció la «campaña total de descrédito, calumnia y mentiras» de las «plataformas de odio antirrevolucionario».
Una «ofensiva brutal» que, a su juicio, «ha pretendido involucrar con las peores artimañas a uno de los sectores sociales inseparables del alma de la revolución, que son nuestros queridos estudiantes y los jóvenes cubanos».
Muchos universitarios han mostrado su oposición frontal al tarifazo, incluso con comunicados de diversas facultades del país que han exigido retirar las medidas y, en un caso, han llamado a un paro estudiantil. Todo esto son acciones pequeñas, pero inéditas en Cuba.

«Afectaciones muy graves»
La presidenta de Etecsa, Tania Velázquez, ahondó por su parte en la necesidad de las medidas. Explicó que los nuevos recursos financieros son esenciales por el deterioro de la infraestructura de telecomunicaciones, algo que podría llegar a provocar «afectaciones parciales muy graves incluso generales».
Agregó, a modo de ejemplo, que el país tiene un centenar de radiobases estropeadas que no puede sustituir y más de 2.000 que no tienen batería asociada (por lo que no funcionan durante los frecuentes apagones).
También habló de unos 25.000 equipos de telefonía estropeados que Etecsa no puede sustituir y un déficit de tarjetas SIM que impide vender nuevas líneas. También alertó que muchas instalaciones no están siendo refrigerados, con el riesgo que supone para su mantenimiento.
Muchos equipos y plataformas «se encuentran en riesgo inminente de tener alguna situación que limite seriamente, gravemente, el a nuestros servicio e incluso lo bloquee por completo», afirmó.
También destacó que para seguir desarrollando estas tecnologías es preciso nuevas inversiones, siempre en divisas.
Velázquez habló de una caída del 77 % de los ingresos en divisas (principalmente recargas de familiares desde el extranjero) entre 2018 y 2024, y denunció que esto se debe a lo que denominó el «secuestro de las recargas internacionales».
La presidenta de Etecsa se refería así a entidades y particulares que ofrecen recargas desde el exterior a mejor precio que la teleco, ya que ellas trabajan entorno al cambio informal (actualmente a 370 pesos cubanos por dólar), mientras que el monopolio estatal opera con el cambio oficial para personas físicas (120 pesos por dólar).