Pamplona (EFE).- Expertos del Real Instituto Elcano han señalado este martes en Pamplona que la política de ámbito local o regional está ganando peso frente a los grandes eventos geopolíticos, ya que al ciudadano puede influirle lo mismo el hecho de no poder entrar con el coche al centro de una ciudad y que Irán corte el suministro de recursos.
El vicepresidente primero y consejero de Presidencia e Igualdad, Félix Taberna, ha participado en un encuentro informativo con expertos y expertas del Real Instituto Elcano sobre la posición geoestratégica de Navarra y las oportunidades que brinda para su desarrollo económico, social y cultural.
En el desayuno han participado cuatro investigadores del Real Instituto Elcano: Judith Arnal, investigadora del Centre for European Policy Studies y consejera del Banco de España; Gonzalo Escribano, catedrático de Economía especializado en geopolítica y política de la energía; Enrique Feás, doctor en Economía y consejero independiente del Instituto de Crédito Oficial; e Ignacio Urbasos, investigador en el área de energía y clima y experto en relaciones internacionales.
La volatilidad de las decisiones geopolíticas
Los investigadores han puesto de manifiesto la «volatilidad» de las decisiones geopolíticas, ya que antes podían influir más en la vida diaria, pero ahora pueden tener el mismo peso ya que los mercados no varían tanto por hechos que ocurren, como las guerras, sino más por lo que pasa con las materias primas. En ese contexto es cuando las decisiones de ámbito local cobran mayor fuerza.

Enrique Feás ha explicado que «la industria y la tecnología, se han convertido en los factores clave», pero que hay cuatro errores básicos que pueden perjudicar a cualquiera, incluso a Navarra, quien «tiene sectores aparentemente muy competitivos y tiene un gasto en I+D, pero tiene los mismos desafíos que el resto del mundo».
Hay cuatro errores: «Creer que las industrias potentes son las manufacturas, pero es cualquier sector capaz de generar alto valor añadido, minusvalorar la importancia de los servicios que son los que determinan la competitividad, considerar que los factores competitivos son estancos y creer que política industrial es una opción cuando una obligación».
La situación de Navarra
Navarra es una tierra exportadora en cuanto a la automoción, por lo que «es muy importante dar el salto al vehículo eléctrico, pero es muy difícil mover un mercado exterior cuando no tenemos un mercado interno acogedor. Hay un problema de aceptación pública rápida del coche eléctrico».

Judith Arnal ha explicado que en la Unión Europea las empresas que más invierten en I+D+i son del sector de la automoción. «Yo no veo un problema en que siga siendo el máximo inversor, pero sí veo problema el marco regulatorio que se ha creado. Si queremos que crezcan hay que apoyar toda la cadena de valor», ha dicho.
De cara a la transición hacia vehículos que no contaminen «es importante tener un objetivo en forma de fecha para productores y consumidores. Si las instituciones públicas ponen los medios, la gente compra eléctrico, sino, el interés decae».
Convencer a los ciudadanos
Gonzalo Escribano ha explicado que «con la misma política no vas a tener la misma aceptación en Navarra que en Madrid y hay que convencer a los ciudadanos». «En Navarra las políticas verdes que más tracción tendrían son las que benefician a las clases medias», ha opinado.
Los sectores clave de Navarra como la automoción y las renovables van a sufrir grandes transformaciones según han indicado y, según Arnal, Navarra puede influir y debe tener controlado su talento e incidir en la capacitación, también con una demanda de empleo y una oferta acorde.
Escribano ha concluido señalando que para tener poder geopolítico en un mundo descarbonizado y electrificado contará mucho la red eléctrica y el posicionamiento de Navarra geográficamente, al lado de la frontera con Francia, es favorable.