Pamplona (EFE).- La empresa navarra Opportunity Health ha diseñado un dispositivo antiatragantamiento automático y autoaplicable para evitar las muertes por asfixia causadas por alimentos u objetos extraños, una incidencia que en España provoca diez fallecimientos diarios.
El atragantamiento es la tercera causa de muerte accidental en España, con más de 3.500 personas fallecidas solo en 2022. Esto equivale a 10 muertes diarias por asfixia. La mayoría de los casos afectan a personas mayores, niños y niñas y personas con movilidad reducida.
Una alternativa a la maniobra de Heimlich
Para intentar reducir el número de fallecimientos por esta causa, la empresa navarra ha diseñado el dispositivo ‘Opportunity’, que ha sido galardonado en los premios ‘Somos Fanes de la Salud y el Bienestar 2025’.

‘Opportunity’, ha explicado a EFE el emprendedor Germán Alejandro Sánchez, fundador y CEO de la empresa, es un dispositivo con forma de mascarilla que incluye un cartucho de CO2 presurizado y un pulsador. Al accionarlo, se crea una presión negativa que es suficiente para sacar en segundos el bolo alimenticio o el objeto extraño de las vías aéreas sin dañarlas.
El dispositivo, que el propio afectado por el atragantamiento puede utilizar sin ayuda de otras personas, es una alternativa a la conocida maniobra de Heimlich, especialmente en situaciones en las que la víctima está sola o no puede recibir ayuda.
No son necesarios conocimientos médicos previos para su uso, ha destacado Sánchez, que integra la empresa Opportunity Health junto con Marcos Lorente -ingeniero biomédico- e Iñigo Almazán -ingeniero de diseño industrial-.

Una idea que surgió en una cena familiar
La idea de desarrollar un dispositivo de este tipo, ha comentado el CEO, le vino en una cena familiar, en la que su hermano mayor se atragantó y su padre, con conocimientos en primeros auxilios, le pudo «literalmente salvar la vida» con la maniobra de Heimlich.
«Pero a mí se me quedó esa pregunta de decir ¿y si hubiera estado solo mi hermano, qué hubiera pasado? La respuesta la tengo clara: habría muerto», ha señalado.
A partir de ahí, ha indicado, estuvo revisando los dispositivos existentes en el mercado para solventar un atragantamiento y sólo encontró dos dispositivos americanos que no son autoaplicables y no son automáticos, sino que requieren de fuerza humana.
Apoyo financiero y científico
La empresa navarra ha obtenido un apoyo financiero de Easo Ventures, sociedad de capital riesgo privada con sede en San Sebastián, y de la navarra Sodena, por importe total de 100.000 euros, que permitirá a la compañía avanzar en el desarrollo del dispositivo.
Con esta inversión, la empresa avanzará en las fases necesarias para la obtención del marcado CE, un paso fundamental para garantizar la viabilidad y seguridad del dispositivo en el mercado europeo.
Al ser un dispositivo médico, el proyecto cuenta con el respaldo de instituciones científicas como la Universidad de Navarra (a través de su Laboratorio de Ingeniería Médica, LabIM) y el Instituto de Investigación Sanitaria de Santiago de Compostela (IDIS), que están colaborando en las validaciones técnicas y ensayos preclínicos para garantizar la seguridad y eficacia del dispositivo, y obtener el marcado CE, que esperan tener para 2027.
Alianzas estratégicas
Además, ha resaltado Sánchez, la empresa ya está estableciendo alianzas estratégicas con entidades del sector sanitario y distribuidores que podrían facilitar la implantación de ‘Opportunity’ en entornos clave como hospitales, colegios, residencias de personas mayores y otros espacios de alto riesgo.
Este dispositivo es complementario a los desfibriladores que ya están muy extendidos por toda España, ha asegurado Sánchez.