Pamplona (EFE).- Navarra 360º es el proyecto que pretende apoyar a 200 agricultores en Navarra para implementar la agricultura regenerativa en su rotación de cultivos con el objetivo de reducir emisiones o favorecer la biodiversidad.
Ante los importantes desafíos que tiene el sector, motivados por el estancamiento de la productividad de la tierra, el aumento de los costos de producción, la baja rentabilidad, las presiones del mercado global, la desertificación y la degradación del medio ambiente y los recursos naturales, esta es una iniciativa público-privada liderada por el consorcio europeo EIT Food, y participan también Danone, Cargill, Intermalta e INTIA, entre otros agentes de la cadena de valor.
Como solución plantean «el método de la agricultura regenerativa, que parte de una visión integral y consigue resultados probados: reduce las emisiones, favorece la biodiversidad, convierte al suelo en el principal protagonista y mejora la rentabilidad de las explotaciones al cabo de unos años.
Ya se está aplicando en países europeos, incluido España, pero tiene aún un gran margen para expandirse entre el sector primario. Uno de sus principales impulsores es el organismo europeo EIT Food, la mayor comunidad del mundo relacionada con la innovación en el sector agroalimentario y este lunes han presentado en Pamplona este proyecto con duración de tres años.
«Proyecto pionero»
En la presentación ha estado presente José María Aierdi, consejero de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno de Navarra, que ha calificado el proyecto de “pionero en Europa” y ha recalcado “su contribución a que la agricultura verde sea también rentable”.

El consejero ha señalado “el interés desde la industria y las cooperativas, así como la implicación directa de los propios productores”, además de valorar el conocimiento acumulado en la Comunidad Foral “gracias a los ensayos de INTIA”.
EIT Food ejerce de coordinador general, fruto de su experiencia en este ámbito. Ya ha formado a más de 2.000 agricultores desde 2020 en nueve países europeos, con más de 30 talleres al año para profesionales del sector, que le han permitido medir la eficacia de las prácticas regenerativas.
«Convencer a las empresas pioneras»
Su directora para el Sur de Europa, Begoña Pérez, ha explicado cómo se gestó hace más de un año este proyecto Navarra 360º, donde fue fundamental “convencer a las empresas más pioneras en este terreno para trabajar juntas, porque juntos avanzamos más que de forma individual”.
Este proyecto de tres años de duración contará con una inversión de 3 millones de euros, y permitirá el estudio de 60 parámetros diferentes. Entre los resultados esperados, se apunta a una reducción del 20 % en el uso de fitosanitarios y del 40 % en la fertilización mineral.
Habrá también una rotación de cultivos de trigo, cebada, avena y colza. Durante el proyecto, se analizarán los costes que suponen para los agricultores y se explorarán nuevos mecanismos de financiación.
“Los agricultores son la base del proyecto: su implicación es la clave de todo”, ha resaltado Melissa Comellas, responsable de agricultura regenerativa en EIT Food, y también de Navarra 360º. “Cada actividad está pensada en ellos, en que les pueda ayudar en su transición y está alineada con los valores que queremos transmitir”.