Vitoria (EFE).- Una tractorada ha defendido la tierra de Álava contra el acoso de las renovables.
Varios centenares de personas y unos cincuenta tractores se han manifestado en esta tractorada por las calles de Vitoria.
La tractorada ha sido en defensa de la tierra de Álava y contra el «acoso» de los promotores de proyectos energéticos renovables que quieren ocupar tierras agrícolas.
La manifestación ha estado convocada por el sindicato agrario UAGA, la asociación de agricultura ecológica Bionekazaritza y la de defensa de la tierra Araba Bizirik.
En la marcha han repartido un mapa con todos los proyectos energéticos, eólicos y fotovoltaicos previstos en Álava, más las líneas de alta tensión que atravesarán el territorio para llevar esa energía a las subestaciones eléctricas.
Es un mapa en el que se aprecia la ocupación del suelo sobre todo en las comarcas de la Llanada, Ayala y Lantarón.
La tractorada, contra el continuo goteo de renovables
Al acabar la marcha han leído un comunicado en el que han asegurado que este continuo goteo de proyectos energéticos amenaza el futuro del sector primario, del medio rural y de la sociedad alavesa.
Lo hacen disfrazados de una pátina «verde», pero que son la «excusa» para el negocio de las grandes empresas energéticas.
También han criticado la «ayuda inestimable» de las instituciones a este plan, tanto de la Diputación como del Gobierno vasco.
«La política errática del diputado general, Ramiro González, que una semana hace unas declaraciones y a la siguiente lo contrario, es un claro ejemplo»
«O el más absoluto desprecio por la vida rural manifestado por la diputada de Medio ambiente y Agricultura, Amaia Barredo, cuando muestra interés exclusivamente por aquellos proyectos en las que se pueden tener réditos económicos», han denunciado.
Al Gobierno vasco le han afeado que plantee un plan de energías renovables que «convierte a toda la comunidad autónoma, no solo a Álava, en un territorio de sacrificio».
Piden la paralización de los proyectos renovables
Por todo ello, han exigido la paralización de todos los proyectos de centrales eólicas y fotovoltaicas que actualmente se están tramitando.
Suponen, además, «un fraude normativo, porque se valen del vacío regulatorio de no disponer de una ordenación territorial consensuada».
Además, han pedido que se declare a la agricultura y ganadería de Álava como actividades estratégicas.
También que se desarrollen políticas que protejan a los agricultores y ganaderos familiares, para poder fijar la población y mantener la actividad rural. EFE