Vitoria, 24 jun (EFE).- El 64 % de los 281 delitos de odio registrados el año pasado en Euskadi fueron de carácter racista o xenófobo, lo que supone un importante aumento, del 23 %, respecto de los datos del año anterior.
El Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco ha hecho público este lunes el Informe de Incidentes de Odio de Euskadi del año pasado, en el que se recoge una bajada del 35 % respecto de los de 2022.
Esta bajada se debe en buena medida por un cambio en cuanto al tratamiento de los incidentes de odio por razones de género, que deja fuera los que pudieran estar definidos como violencia machista.
La cifra de los casos de odio (281) es muy inferior a la del año anterior (435) pero sigue siendo el doble de los que se registraban en los años previos a la pandemia (105 en 2019).
180 delitos de carácter racista
Del total de incidentes, 180 tuvieron un carácter racista o xenófobo, 45 estuvieron relacionados con la orientación o identidad sexual; 22 con la orientación política o ideología y 18 con el género.
En todo caso, el número de incidentes racistas también bajó en términos absolutos, un 22 % menos.
El ámbito de la orientación e identidad sexual registra el 16 % de los casos (45), menos de la mitad de los del año anterior (96).
En tercer lugar, se encuentran los delitos de odio basados en la ideología y la orientación política, que son casi el 8 % de todos (22 casos). Su peso relativo es idéntico al de 2022, pero hay un descenso en el número absoluto de casos (-35 %).
En cuarto lugar, los delitos cometidos por razón de género descienden de forma muy acusada hasta el 6 % de los casos registrados (-61 %), perdiendo así el tercer lugar que ocuparon el año anterior en el mapa de odio.
Esta bajada anual es aún más pronunciada si se considera el número de incidentes en términos absolutos, que descendió de 88 a 18 casos (-80 %).
Además de los citados cambios en la elaboración del informe en este descenso tiene una notable incidencia que el año pasado desaparecieron los casos de «pinchazos» a mujeres durante el periodo estival en contextos festivos o de aglomeraciones.
La tercera parte fueron lesiones
Por tipología delictiva, del total de casos el 32 % (101) fueron lesiones, el 24 % (76) amenazas, el 15 % fueron discursos de odio (46 casos), el 13 % coacciones (41) y el 7 % fueron episodios de trato degradante (22 casos).
Bizkaia concentró algo menos de la mitad de los delitos de odio, 136, el 48 %, mientras que Gipuzkoa aglutinó casi cuatro de cada diez (112 y un 39 %). Álava reunió poco más de una décima parte (33 casos y un 12 %). La distribución por territorios se mantuvo similar al anterior ejercicio, con un sensible incremento en Gipuzkoa y un correlativo descenso en Bizkaia.
Si se analizan exclusivamente los delitos de racismo o xenofobia, en línea con años anteriores, Bizkaia siguió concentrando, por séptimo año consecutivo, la mayor parte de los casos, con 83 de los 175 (el 47 %), mientras que el porcentaje de los casos registrados en Gipuzkoa se incrementó ligeramente, con 74 casos y un 42 %. En Álava se registraron 18 casos, un 10 %, una cifra ligeramente inferior a la del año anterior.
Como dato curioso, en el informe se constata que únicamente se registraron 20 delitos a través de internet o por teléfono, tan solo el 7 % del total, cuando los delitos generales cometidos por estas vías están en aumento.
Un total de 269 imputados
Por el conjunto de incidentes de odio a lo largo del año pasado se imputaron a 269 personas, de las cuales más del 78 % (211) tenían nacionalidad española y de estas el 83 % eran originarias de Euskadi.
El resto de las imputaciones, 54, son de origen extranjero, de las cuales la gran mayoría procedían de África (41 %) y en menor medida de América Central y del Sur (33 %).
El número de personas imputadas procedentes de Gipuzkoa aglutina la mayor parte de los casos (84 y el 31 % del total), colocándose por primera vez ligeramente por delante de Bizkaia, territorio del que proviene el 29 % de los imputados (78). Álava fue el origen de un 5 % de los imputados por delitos de odio (14 casos).
Desplome de las detenciones
Durante el año pasado la Ertzaintza detuvo a un total de 20 personas, menos de la mitad que en 2022 (44). Por su origen, la mitad de los detenidos eran extranjeros (10); entre ellos la mayor parte eran de Marruecos y Argelia (20 % y 10 % del total, en cada caso), seguidas de las personas de origen latinoamericano (15 % del total).
De entre los 9 detenidos con nacionalidad española, 8 eran de la Comunidad Autónoma Vasca, y el grueso (6) de Gipuzkoa.
En 2023 se ha registraron un total de 305 victimizaciones por casos de odio en Euskadi, lo que supone una notable bajada del 47 % respecto de las registradas en 2022 (572).
Las víctimas de origen extranjero fueron el 59 % de las victimizaciones (181), siendo las procedentes de América Latina y África las más numerosas (28 % y 24 % del total, respectivamente).
El año pasado hubo una única infracción istrativa por la ley contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte. Tuvo lugar en Bilbao el partido entre el Athletic y el Betis en el que un aficionado bético gritó insultos racistas.
Llama la atención que a lo largo de todo el año pasado no se denunció ningún incidente de odio relacionado con la religión o creencias y tan solo 1 por conductas antisemitas.