Bilbao (EFE).- Ernesto Valverde, entrenador del Athletic Club, itió que el hecho de que la final de la Liga Europa 2024-25 se dispute en San Mamés es «una ilusión general» en el entorno rojiblanco.
Sin embargo, recalcó que en el vestuario no lo tienen «en la cabeza».
«Cómo vamos a pensar en la final si no hemos jugado ningún partido. Sería increíble empezar una competición de tantos partidos empezando por el final en vez de por el principio», señaló en su valoración del sorteo celebrado en Mónaco.
Aduriz, ‘mano inocente’
En ese sorteo, Aritz Aduriz ha ejercido como una de las ‘manos inocentes’.
El Athletic deberá enfrentarse en San Mamés al Slavia Praga y el Viktoria Plzen checos, el AZ Alkmaar neerlandés y el Elfsborg sueco.
Visitará a la Roma, los equipos turcos de Fenerbahce y Besiktas y el búlgaro del Ludogorets.
«No hay rivales fáciles»
«Es todo diferente y no sabemos cómo va exactamente. Esperamos que funcione. Son cuatro salidas duras, las dos de Estambul, Roma y Bulgaria contra un equipo que juega regularmente en Europa», apuntó Valverde.
Rechazó de manera tajante que sean más asequibles los rivales que tienen que visitar Bilbao.
«Aquí no hay rivales fáciles. Contra el Sparta de Praga, por ejemplo, jugué en Champions y tienen un entrenador que les mete una gran presión e intensidad. Es muy duro. A los otros les conozco menos y habrá que estudiarlos».
En estas competiciones cualquier partido que no estés acertado o tengas mala suerte vas fuera», avisó Valverde.
