Vitoria (EFE).- El juzgado de guardia de Vitoria ha ordenado el ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza para el hombre de 84 años acusado de homicidio en grado de tentativa en el ámbito de la violencia de género tras supuestamente haber apuñalado a su mujer, de 76 años.
El hombre, que fue detenido ayer por la Ertzaintza, ha sido puesto a disposición judicial este sábado y el juez de guardia de Vitoria ha decretado su ingreso en prisión y que a partir de ahora la instrucción pase al juzgado de violencia sobre la mujer, han informado a EFE fuentes judiciales.
Los hechos ocurrieron hacia las cuatro de la madrugada en un piso, el domicilio conyugal, de la calle Cuba del barrio de El Pilar.
Al parecer la mujer recibió hasta tres puñaladas con un cuchillo de grandes dimensiones, una de ellas, la de mayor gravedad, en el costado izquierdo que le produjo un neumotórax.
La víctima permanece en el hospital de Txagorritxu de Vitoria desde ayer, cuando ingresó en estado grave.
Representantes del Ayuntamiento de Vitoria, del Gobierno Vasco y de la Diputación de Álava, se han concentrado en la plaza España, donde se ha desplegado una pancarta con la frase ‘Vitoria-Gasteiz eraso matxisten aurka-Vitoria-Gasteiz contra las agresiones machistas’.
La alcaldesa: Es una realidad cruda y difícil de entender
Tras la concentración, la alcaldesa de Vitoria, Maider Etxebarria, ha mostrado su absoluta condena a esta agresión machista. «Es una realidad muy cruda, horrorosa y difícil de entender para muchas de nosotras», ha subrayado.
Ha trasladado su apoyo a la víctima y a los familiares y ha confiado en que la mujer, cuyo estado de salud es «duro», se recupere lo antes posible.
«Me cuesta pensar que haya partidos políticos y personas que todavía nieguen o quieran invisibilizar la violencia machista», ha denunciado.
Emakunde avisa de la invisibilidad de las mujeres mayores
Por su parte, la directora del Instituto Vasco de la Mujer -Emakunde-, Miren Elgarresta, ha confiado en que la situación de la víctima mejore y salga viva de esta agresión.
Ha puesto de manifiesto la «invisibilidad» que sufre el grupo de mujeres mayores que padecen situaciones de violencia machista y que tienen dificultades para reconocer estas situaciones y denunciar.
Es un colectivo, ha añadido, que no ha tenido autonomía económica y muchas «han naturalizado el sufrimiento».
Por ello, ha añadido, es importante que las instituciones den una respuesta pública para decir basta a la violencia machista. EFE
