Coche de la Guardia Civil, en una imagen de archivo. EFE/Mariscal

Detenido un jefe de obra por la muerte de un trabajador al chocar una grúa con un tren

Oviedo (EFE).- La Guardia Civil ha detenido a un jefe de obra por su presunta responsabilidad en la muerte de un trabajador al impactar un tren contra la cesta de un camión grúa en la que se encontraba para ejecutar las labores necesarias para la sustitución de una línea de alta tensión, ha informado este jueves la Comandancia de Asturias.

El accidente se produjo poco antes de las 16:00 horas del pasado 11 de septiembre a la altura del kilómetro 23,9 de la vía férrea Trubia-Collanzo, cerca de la localidad de Figaredo, en el concejo de Mieres.

El trabajador, de 32 años, se encontraba en el interior de una cesta de un camión grúa situado junto a la vía, en la carretera AS-375.

El camión tenía la pluma desplegada sobre la vía para las labores de sustitución de la línea de alta tensión, cuando llegó un tren de cercanías que impactó sobre la cesta en la que se encontraba el trabajador, que falleció a causa del golpe.

Como promotora de la obra, la compañía distribuidora de electricidad había contratado a una empresa de montajes para realizar trabajos de sustitución de la línea eléctrica, a una segunda especializada en la coordinación de seguridad y a una tercera encargada del control de la parte técnico-eléctrica.

Una veintena de declaraciones

La primera de las empresas, encargada de ejecutar la sustitución de la línea eléctrica, subcontrató los servicios de otra que contaba con vehículos especializados y el correspondiente personal de manejo, a la que pertenecía el trabajador fallecido.

Para la ejecución de los trabajos sobre la vía se estableció con el operador de la infraestructura una serie de condiciones relacionadas con las franjas horarias en las que se podían acometer.

Así, un coordinador cuya función es la de ‘piloto de seguridad’ era el encargado de estar en o con la sala de control y de ordenar la paralización de los trabajos al paso de los trenes, mientras que la empresa encargada de la ejecución de la obra disponía de un jefe de equipo que iba dando las instrucciones de los trabajos que se iban realizando.

Aquel día, el ‘piloto de seguridad’ finalizó su jornada laboral a las 13:00 horas, lo que notificó al jefe de equipo de la obra, recordando además que no podían llevar a cabo ningún trabajo que invadiera la zona de seguridad ferroviaria sin su presencia.

Pese a ello, los trabajos continuaron hasta que un tren de cercanías impactó contra la cesta provocando la muerte del trabajador.

La Guardia Civil, que para el desarrollo de las investigaciones tomó declaración a una veintena de personas y revisó diversa documentación como contratos, planes de seguridad y actas de reuniones, detuvo al jefe de obra el pasado 10 de octubre como presunto autor de un delito de homicidio por imprudencia. EFE