Labores de rastreo en la zona donde se produjo el alud. EFE/Alberto Morante/Archivo.

La Fiscalía pide 2 años para el jefe de Carreteras por el alud mortal de San Isidro

Oviedo (EFE).- La Fiscalía solita una pena de dos años de prisión para el responsable del Servicio de Conservación y Explotación de Carreteras del Principado en el momento en el que se produjo el accidente que causó la muerte de dos operarios de una máquina quitanieves atrapados por un alud en el puerto de San Isidro el 1 de enero de 2021.

Según ha informado este jueves la Fiscalía del Principado de Asturias, el acusado se ha mostrado conforme con la calificación de los hechos y con la petición de condena efectuada por la Sección de Seguridad y Salud en el Trabajo del Ministerio Fiscal, que no se opone a que se le conceda la suspensión de la ejecución de la pena privativa de libertad durante dos años, condicionada al pago de una multa de seis meses con una cuota diaria de 10 euros (1.800 euros).

No obstante, la vista oral, que está señalada para las 9:30 horas de mañana, viernes, en el Juzgado de lo Penal número 2 de Oviedo, sigue delante debido a que las acusaciones particular y popular no han secundado el acuerdo de conformidad.

El Ministerio Fiscal considera que el entonces responsable es autor de un delito contra la vida y la salud de los trabajadores en concurso con dos delitos de homicidio por imprudencia grave, al entender que no se valoró suficientemente el riesgo de aludes pese a que éste era muy elevado».

Condiciones climáticas desfavorables

El día en que se produjo la alud que sepultó a los dos operarios de la quitanieves, C.F.O. y V.G.G., existían unas condiciones climáticas desfavorables por un temporal que había dejado una copiosa nevada en las montañas, lo que dio lugar a la intervención de los equipos de limpieza de carreteras.

El Servicio de Conservación y Explotación de Carreteras de la Dirección General de Infraestructuras Viarias y Portuarias de la Consejería de Medio Rural y Cohesión Territorial activó los equipos de limpieza en distintas vías y a los dos trabajadores se les encargó a las 7:40 horas la limpieza de la AS-112 con una máquina quitanieves.

Dos horas más tarde, a las 09.40 horas, se decidió declarar el puerto cerrado ante los riesgos de aludes y la imposibilidad de circular con seguridad por la carretera, si bien la máquina siguió trabajando para facilitar a varios vehículos el descenso del puerto.

Horas más tarde y después de que se produjeran varios desprendimientos de nieve que les obligaron a seguir interviniendo ante la presencia de vehículos en la vía, los operarios tuvieron que salir del vehículo para desatascar la chimenea de nieve, momento en el se produjo «un enorme alud» que provocó la muerte de los dos trabajadores e incluso atrapó al conductor de un vehículo.

C.F.O fue encontrado sepultado por la nieve horas más tarde el mismo día del accidente en un lugar próximo a donde inicialmente estaba la máquina quitanieves, mientras que el cuerpo de V.G.G. fue localizado el 30 de enero, también sepultado por la nieve, ladera abajo por donde se precipitó la máquina quitanieves arrastrada por el alud.

Una zona «especialmente peligrosa»

La Fiscalía apunta que la zona donde se produjo el alud que causó el accidente está considerada como «especialmente peligrosa por el riesgo de avalanchas».

Además, remarca que la intervención de limpieza llevada a cabo por los trabajadores fue «innecesaria» al existir «un riesgo muy relevante de alud que suponía la posibilidad de que, si les alcanzaba, ocasionase su fallecimiento, como efectivamente sucedió».

Así, considera que no se valoró suficientemente el riesgo de aludes y en concreto, la magnitud que podían alcanzar,»pese a que el riesgo era muy elevado y no existía ninguna necesidad de actuar en el rescate de ninguna persona». EFE