Vista de la mina de Cerredo tras el accidente. EFE/ Paco Paredes

Denuncian ante la Fiscalía que la mina de Cerredo se explotaba para sacar carbón

Oviedo (EFE).- Promining, empresa vinculada al anterior dueño de la mina de Cerredo, el empresario leonés Victorino Alonso, ha denunciado ante la Fiscalía de Asturias que en esta explotación del suroccidente asturiano en la que el lunes fallecieron cinco trabajadores a causa de una explosión, lejos de hacerse labores de investigación se sacaba carbón de manera irregular para calefacciones y usos industriales.

«Lo que se está haciendo en Cerredo es lisa y llanamente una explotación de carbón, sobre macizos que quedaron sin explotar en la antigua mina y cuyo destino es la venta del carbón -el grano para calefacciones- (…) y el menudo -tras mezclarlo con carbones- para otros usos industriales», señala la denuncia fechada el pasado miércoles, a la que ha tenido EFE y que este viernes ha adelantado La Nueva España.

La empresa Blue Solving tiene desde el pasado verano un permiso para investigar en el nivel uno de la mina de Cerredo usos minerales para hacer grafito, y otro para recuperar viejas estructuras y chatarra en el nivel tercero de la explotación, en el que tuvo lugar la explosión que según las principales hipótesis se debió a una bolsa de grisú.

La fabricación de grafito se puede hacer a partir de coque de petróleo o de brea, hulla o grafito, «materiales todos ellos que no existen en esta mina», afirma el denunciante que además asegura que, en cualquier caso, el proceso requiere de unas instalaciones «que desde luego ni están ni se les espera en la planta de tratamiento de Cerredo».

Asimismo, mantiene que en la planta en la que se produjo el accidente «al parecer se estaba llevando a cabo la explotación de la capa Z de ese yacimiento en encerrado, es decir, sin la segunda salida a la que obliga la legislación minera, y por tanto, sin circuito de ventilación».

Añade que han tenido conocimiento de que alguno de los fallecidos «ya había sufrido mareos en días previos por la presencia de gas» algo que «no es de extrañar, si como que parece ser que la explotación no tenía ni siquiera ventilación secundaria» y solo contaba con una turbina de aire comprimido que tomaba «aire viciado» de otras galerías subterráneas y no del exterior.

Carbón siderúrgico

En la denuncia también se hace referencia a la mina de Tormaleo, que explota Carbones La Vega, perteneciente al mismo entramado societario de Blue Solving y que, según el escrito trasladado a la Fiscalía, solo dispone de licencia para explotación subterránea pero donde «continúan las labores a cielo abierto».

El carbón de Tormaleo, siempre según el denunciante, sí son aptos para ser usados en las instalaciones siderúrgicas que ArecelorMittal tiene en Asturias, pero advierte de que «los volúmenes suministrados apuntan a que no solamente se suministraba carbón de la mina, sino también de importación».

Permisividad

El de Promining también deja constancia en su denuncia de la «inexplicable, o quizás no tanto, permisividad de las autoridades competentes» ante una mina a cielo abierto «que se hace pasar por subterránea» como es la de Tormaleo y a la que «cualquiera puede acercarse y comprobar lo que allí se esta haciendo», y ante otra como la de Cerredo «de la que salen camiones desde hace años».

La denuncia ante la Fiscalía ha tenido lugar después de que esta misma empresa hiciese llegar antes del accidente, a mediados de marzo, a la Dirección General de Energía, Minería y Reactivación de Asturias y al Instituto para la Transición Ecológica un escrito denunciando irregularidades en esas explotaciones.

La consejera de Transición Ecológica de Asturias, Berlarmina Díaz, ha descartado que se hubiese dado una actuación negligente por parte de la autoridad minera e incidió en que las ocho inspecciones realizadas en los últimos dos años en Cerredo no detectaron actividad anormal alguna, pero que están investigando la actividad que desarrollaba actualmente Blue Solving. EFE