Barcelona (EFE).- Un estudio realizado por el Hospital Vall d’Hebron de Barcelona evidencia que añadir una terapia de campos eléctricos al procedimiento estándar de quimioterapia mejora el tratamiento y supervivencia de pacientes con cáncer de páncreas localmente avanzado.
Este estudio ha sido liderado por la doctora Teresa Macarulla, oncóloga del Hospital Universitario Vall d’Hebron, y hoy ha sido presentado en el Congreso de la Sociedad Americana de Oncología Médica (ASCO) que se celebra en Chicago (EEUU) hasta el 3 de junio.
Los resultados de la investigación médica han sido publicados, paralelamente, en la revista Journal of Clinical Oncology.
El ensayo clínico en fase 3 (PANOVA-3) demuestra que emplear campos eléctricos ayuda a controlar el dolor, además de mejorar la supervivencia en pacientes con adenocarcinoma pancreático localmente avanzado que no se puede operar.
Según el equipo de investigadores del Hospital Vall d’Hebron, añadir la terapia de campos eléctricos (TTFields) al tratamiento actual de gemcitabina y nab-paclitaxel, mejora la supervivencia global, la supervivencia sin dolor y la supervivencia libre de progresión en pacientes con cáncer de páncreas.
Un cáncer difícil de tratar con pronóstico desfavorable
La mayoría de los pacientes con adenocarcinoma pancreático presentan enfermedad avanzada en el momento del diagnóstico, por lo que es difícil de tratar, con tasas de supervivencia a 5 años de entre el 8 % y el 13 %, mientras que el pronóstico de estos pacientes es desfavorable.
Los tratamientos aprobados para este grupo de pacientes se han ido extrapolando de los resultados de estudios de la enfermedad metastática, y el ensayo clínico es el primero que evalúa una estrategia terapéutica específica para pacientes con cáncer de páncreas localmente avanzado que no son candidatos a cirugía.
¿Qué son los TTFields?
Los campos de tratamiento tumoral (TTFields) son una terapia no invasiva que emplea campos eléctricos de baja intensidad que interrumpen los procesos celulares críticos para la viabilidad de las células cancerosas y la progresión tumoral.
Esta terapia se istra mediante electrodos que se colocan en la piel cerca del tumor, y se conectan a un dispositivo portátil que se puede llevar en una mochila o bandolera.
El dispositivo envía corrientes eléctricas suaves que actúan sobre las células cancerosas, sin afectar a la mayoría de las células sanas cercanas.
Los TTFields han demostrado una actividad significativa in vitro e in vivo en modelos de cáncer de páncreas, con una eficacia mejorada cuando se utilizan con quimioterapia.
Participación de 571 pacientes
En el ensayo, participaron 571 pacientes diagnosticados con adenocarcinoma pancreático localmente avanzado, y todos ellos fueron tratados con el tratamiento estándar de gemcitabina/nab-paclitaxel, y de forma aleatoria se añadió o no la terapia TTFields de campos eléctricos.
La supervivencia global se prolongó de forma estadísticamente significativa en los pacientes tratados con TTFields más el tratamiento estándar con una media de 16,2 meses frente a los 14,2 meses en los pacientes que recibieron únicamente la quimioterapia estándar.
La supervivencia sin dolor también ha mejorado en los pacientes tratados con campos eléctricos: 15,2 meses de media versus 9,1 meses sin esta terapia.
La supervivencia libre de progresión a distancia, es decir el tiempo que pasa desde el inicio del tratamiento hasta que aparecen signos del tumor en otros órganos, también mejoró al pasar de 11,5 meses de media a 13,9 meses.
El 76,3 % de los pacientes que recibieron terapia TTFields experimentaron efectos adversos cutáneos de grado 1 o 2, pero no se observaron otras señales de alarma.
Beneficios en los diversos tipos de supervivencia
Según la doctora Teresa Macarulla, «en conclusión, los resultados de este estudio demuestran los beneficios en términos de supervivencia global, supervivencia sin dolor y supervivencia libre de progresión a distancia de una nueva estrategia terapéutica».
Además, ha añadido, «es la primera terapia dirigida específicamente a pacientes con la enfermedad localmente avanzada que consiste en añadir campos eléctricos al tratamiento estándar».
Para este tipo de pacientes, «se trata de una nueva oportunidad», ha subrayado, ya que hasta ahora «los avances en la investigación no habían supuesto una mejora específica para ellos».