Santander (EFE).- La Guardia Civil ha desarticulado, con la detención de seis personas en Cantabria, una banda supuestamente dedicada a la compraventa de droga.
Este grupo operaba tanto en Cantabria como en Palma de Mallorca y León y, con las ganancias por los estupefacientes, adquiría bitcoins.
Según informa la Guardia Civil, que ha contado para esta operación con el apoyo de agentes de Pontevedra, Zaragoza y León, cinco de los detenidos son hombres de entre 31 y 48 años.
También hay una mujer de 24 años.
Centro de operaciones en un taller
De los seis detenidos dos ellos, entre los cuales está el cabecilla de la banda, han ingresado en prisión, mientras que el resto han quedado en libertad con cargos.
La operación comenzó en noviembre del año pasado, cuando la Guardia Civil conoció que varias personas podían estar vendiendo drogas en las localidades cántabras de Maliaño, Astillero y Torrelavega.
Un taller mecánico en Astillero era el centro de operaciones.
Tras las primeras investigaciones, se averiguó que una banda era la responsable de la venta de esas drogas.
Y también que un vecino de la localidad cántabra de Boo de Piélagos era el cabecilla.
El pasado agosto, agentes de la Guardia Civil siguieron a un vehículo alquilado en Cantabria por dos de la banda, que fue interceptado en el Puerto de Palma de Mallorca.
Doble fondo
En el coche se localizó un doble fondo, donde había 1,5 kilos de cocaína, por lo que se detuvo a sus dos ocupantes.
Ante esas detenciones, la Guardia Civil llevó a cabo en Cantabria seis registros.
Tuvieron lugar en domicilios en Camargo, Soto de la Marina (Bezana), Boo de Piélagos y Torrelavega.
En ellos se intervinieron más de 8 kilos de marihuana, un kilo de hachís, 1,5 kilos de cocaína y pastillas de éxtasis.
También, varias balanzas de precisión, teléfonos móviles, dos escopetas, una de ellas con cañones recortados, un revolver, una ballesta y más de 5.000 euros en metálico.
Así mismo se incautaron más de 200 pares de zapatillas deportivas y casi 300 prendas de ropa falsificadas.
Bitcoins
Según explica la Guardia Civil, el cabecilla de la organización estaba almacenando parte de las ganancias con el tráfico de drogas a través de la compra de bitcoins.
En el registro de su domicilio, los agentes intervinieron dos billeteras frías de criptomonedas.
